Más principios Lean: 2) Nivelación. f) Acerca de la estandarización

Más principios Lean: 2) Nivelación. f) Acerca de la estandarización

La suma de la carga de trabajo manual de las referencias asignadas a una sección partido por su tiempo de ciclo, nos da el número de operarios necesarios.

El caso más sencillo es cuando disponemos de una línea de producción que trabaja a ritmo de la demanda de tal forma que el denominador de la ecuación es el takt-time. Esto me permite tener un equipo de personas constante trabajando con procedimientos estándar.

Si la velocidad de dicha línea es el doble o el triple del ritmo equivalente al takt-time a un turno se puede jugar con el número de turnos pero en otras cadencias impuestas por la máquina, la sección no trabajará de forma constante ya que no tendrá carga suficiente (se presupone que, para cumplir con la demanda, el tiempo de ciclo será siempre inferior al takt-time a un determinado número de turnos). Es decir, habrá horas no utilizadas, lo que implica que deben existir otras líneas en la misma situación que puedan aprovechar estas horas-hombre sobrantes.

A medida que el número de líneas crece, la estandarización se va complicando porque las posibles combinaciones de líneas trabajando en un preciso instante se incrementan de tal modo que será difícil establecer un procedimiento global.

Todavía se complica más el ejercicio si, en lugar de líneas, hablamos de máquinas individuales que tienen su propio tiempo de ciclo en función de la referencia que estén fabricando. En este escenario será muy complicado definir un estándar donde un mismo operario realice tareas en máquinas distintas.

Esto tiene mayor impacto en el caso de saturaciones bajas. En este escenario tan variable con múltiples configuraciones, el reparto se produciría en una asignación sobre la marcha que debería tener en cuenta las máquinas que están funcionando, la carga manual de cada referencia, los tiempos de ciclo, las eficiencias y los desplazamientos entre puestos, lo cual será inviable en la mayoría de los casos, contrario a la idea de estándar y probable motivo de conflicto en una gestión permanente.

Por este motivo, en un job-shop, difícilmente se produce la separación hombre-máquina a costa de una menor productividad manual. Recopilando: una reingeniería orientada a acercar máquinas y compartir operarios entre ellas será más factible si se cumplen las siguientes condiciones:

  • Cargas de trabajo constantes en las máquinas, es decir, capacidades cercanas al 100%
  • Tiempos de ciclo, cargas de trabajo y eficiencias similares tanto para las distintas referencias de una máquina como para las distintas máquinas.
  • Tareas manuales realizadas fuera del ciclo de la máquina, pudiendo acumular un pequeño stock o tiempos de ciclo suficientemente largos para tener tiempo de completar las tareas en los distintos puestos
  • Escenario de alta automatización, con saturaciones bajas respecto a una máquina

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Jordi Planelles administrator

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